Esta canción la descubrí ayer. Ni idea de que existía. Bueno, sí. De algo me sonaba el nombre de Haim, y de haber visto la portada. Pero no me había aventurado a escuchar nada de ellas. Entonces decidí escuchar Forever. Y la verdad es que me ha provocado cierto desconcierto.
Forever- Haim
En una primera escucha se me antojó rara y confusa. A la segunda me continuó pareciendo extraña, pero logré descifrar su encanto. Parece sacada completamente de los años ochenta. No por una leve influencia, o destello revival nostálgico. Es completamente el retorno a otra época. Con sintetizadores felices y guitarras perdidas, la curiosa voz de Danielle nos transporta a un paisaje veraniego alegre, cantando versos rápidamente y dibujando una melodía medio funk, medio synth-pop despreocupada y cada vez más agradable a medida de las escuchas. Una canción original. El vídeo también es un compendio de lo vintage, lo hipster, lo veraniego y lo cómico, a juego con la canción.
Parece que, poco a poco, cada día se hace de noche antes. Tardes magentas que llegan para esperar al tapiz azul estrellado. El calor espeso y húmedo se despide lentamente, mientras por la puerta de entrada el fresco suave otoñal saca la cabeza. Pero todavía se queda el sol radiante, el agua fría en la piel, y el verano en la mente. En esta entrada vienen varias cosas para éstos días atenuados, las horas largas. Una entrada que combina dos secciones: las imágenes y una historia corta.
A continuación un nuevo "Marchando una de imágenes". Ésta vez con el tema de las puestas de sol, aludiendo al título de la entrada.
Y para terminar una historia-reflexión-metáfora improvisada...
Observaba el sol ponerse tras el horizonte. El cielo se teñía de rosa y oro. Tenía prisa, quería tiempo, lo malgastaba mirando una puesta de sol. El coche aparcado en la arena, mientras con un palo trazaba círculos sobre la arena. Cuando el sol volviese a salir, mi vida habría cambiado. Y tenía dos opciones: disfrutar en silencio con resignación y pena uno de los últimos momentos que viviría siendo yo tal y cómo soy, o huir, gritar, entrar en un desenfreno por tal de evitar lo inevitable. Lo segundo seguro que me haría sentir mejor por un instante, haciéndome creer que tendría el control, pero la primera opción era la más segura. Conformarme con sal en los ojos y café en la garganta. El deportivo viejo, rojo y vistoso, me atraía. "Al menos sé libre por última vez". Las llaves tintineando en mi bolsillo. Las ganas me podían. Abrí la puerta, rumbo por la interminable carretera. Palmeras, casas, arena. Libertad. Y una sombra en mi existencia. No me encontrarían. No. No aceptaría el trato. El precio era demasiado alto. Muchas cosas en juego. Corro. El viento me azota en la cara. Cada vez estoy más lejos. ¿Por qué tuve qué conocerle en ése mismo instante? Una casualidad trazada cruelmente por el despiadado destino. La luna se alzaba. Un motel y una gasolinera a ambos lados de la carretera. Pero no tenía dinero en el bolsillo. Abrí el maletero, en busca de algún billete extraviado y oportuno, cuándo oí pasos detrás mío. No hizo falta girarme para saber quién era. La luna se alzaba, y yo miraba a ella con adoración. Su voz grave y quejumbrosa infiltrándose en mí corazón. Un destello ámbar en sus ojos que noté pese a estar de espaldas a él. La luna, que bella. La luna. Abrí mi boca y dejé escapar ése cántico interior. Fauces doradas. En el suelo, aullando, me yazco, y oigo su voz grave y quejumbrosa infiltrarse en mi corazón. Ésta él mirando mi cuerpo canino, mis ojos de ámbar, mi corazón de obsidiana. La luna. "Cariño, la luna soy yo".
La narración ha acabado siendo una historia rara de hombres lobo.
Muy veraniegas todas. Aunque en la primera no sé por qué están tendidos unos casettes... Y en la última el señor que se está tirando por el tobogán tiene una posición bastante curiosa.
Por cierto, ésta sección es nueva. Se publicarán un grupo de imágenes que tengan que ver con algo en concreto, en éste caso, ha sido el verano.
Una playa desierta es el panorama. El leopardo yace tumbado en la arena. No utiliza toalla, ni es visible sombrilla alguno. Estirado cual animal salvaje que es, está despojado de cualquier destello humano propio de su última aparición. Se despide de la vida plástica, artificial y pública en la cual parecía estar destinado a brillar. Hace rato que no ha comido. Sus últimas comidas, además, no fueron muy sustanciales. Canapés más pequeños que un pulgar y ensaladas de colores chillones muy sospechosos eran lo que podría decirse que fue la base de su alimentación durante una semana. Y la carne... ¿Qué carne? Unas bolitas mínusculas rociadas con salsitas aguadas ensartadas por una brocheta servidas en un gran plato que las hacía parecer más ridículas aún. Y todo el mundo- al menos el de su entorno entonces- parecía estar muy entusiasmado con tales tomaduras de pelo. "Arte, esto es una obra de arte" decían. El leopardo no contestaba a tales afirmaciones, pues temía las posibles reacciones a su réplica...
Oye un ruido. Y huele, lo huele... ¡Un animal! Inocente presa encaminada a un fatal destino en sus fauces. Su cuerpo se lo pedía a gritos. Se gira elegantemente, pero con un gran deje siniestro, dispuesto a cazar a su víctima pero... Se trata del gato que conoció en el estreno. Unas gafas de sol reposaban sobre su hocico, embadurnado de crema. "Pero si los gatos no necesitáis crema..." dice el leoprdo. "Ni gafas de sol... ¿No me dices nada más?" añade el gato. "No sé. Quiero alejarme del estilo de vida que llevan los humanos". "Bien que haces... A mi ganas no me faltan, y más con el trabajo que me han encomendado esos... Periodistas. Si se les puede llamar así... Qué necesidad de destacar cosas, galardonar lo primero que se encuentre en su camino y hacer ránquings... ¿Pero que quieren conseguir?" se queja el gato. "Déjalos. Vive en la naturaleza. Sé lo qué siempre has sido... Un animal" razona el leopardo. "No. De momento no, hasta que encuentre la manera de continuar teniendo esas galletitas... Qué buenas... Igualmente, creo que este tema te puede interesar. Es una lista y una revisión de las canciones del verano (por éxito, no porque sean mis preferidas). Amigo, relájate... Porque lo voy a explicar del tirón... (Los vídeos son sólo audio o los lyrics, cuando lo que nos centremos sea realmente el vídeo en otra ocasión, se pondrá, pero esta vez no.)
I Love It- Icona Pop
-La verdad es que no me gusta mucho esta canción. Chillan como unas locas. Y se repite una y otra vez hasta la saciedad. Igualmente, se le ha de reconocer el éxito que está teniendo, que supongo que se le debe atribuir a que es extremadamente pegadiza y muy animada... Pero a mi sinceramente no me gusta, no tiene prácticamente melodía y me taladra...
Get Lucky- Daft Punk (feat. Pharrell)
-Míralos. Aquí están los "robots" que encandilaron a este felino con Derezzed. Con un sonido muchísimo más setentero, tan disco, con guitarras, Daft Punk se alzan en la cumbre del éxito, y de otros aspectos. Suena diferente a otras canciones suyas, y a cualquiera que haya salido este 2013. Se engancha, recuerda a canciones de décadas pasadas. Es buena canción. Aunque prefiera otras anteriores suyas -Around The World, One More Time, Harder Better...- no me disgusta en absoluto... Gustos a parte (eso otro día, hoy se trata de otra cosa), es una de las canciones más sonadas, más esperadas y más de todo de este año, y sobretodo de este verano. Un sonido diferente: está bastante bien.
Blurred Lines- Robin Thickle (feat. T.I. and Pharrell)
-Una melodía divertida, en un estilo que me recuerda a James Brown, funky y soul, pero mezclado con pop trae aire fresco al panorama mainstream musical. Lo que le retraigo es su horrible letra (no entiendo como pueden continuar diciendo cosas así a estas alturas en una canción). Pegadiza y alegre, así la definiría.
More Than Friends- Inna
-Entre las canciones aquí mencionadas, puede que ésta sea la más sonada de este verano. Cien por cien veraniega, alegre, despreocupada, evoca playas tropicales. No es ni mucho menos una gran canción, pero lo que si que es, porque no pretende más, es ser una animada canción para el verano. Y eso lo consigue de sobras. Dance estival de la mano de Inna.
Thrift Shop- Macklemore & Ryan Lewis
-Al principio no me gustaba mucho, pero al final lo ha conseguido. Con una letra sobre las tiendas de segunda mano, y un curioso pero divertido vídeo acorde, Thrift Shop es una humorística canción hip-hop que está bastante bien. Lo intrigante es la chaqueta de leopardo peludo de Macklemore... Sr. Leopardo, yo no lo tendría en cuenta...
Stay- Rihanna (feat. Mikki Ekko)
-Una de las mejores canciones de Rihanna. Es una balada lenta y bonita, con un piano, y la colaboración de Mikki Ekko encaja perfectamente. Una canción intimista, un ruego melódico pidiendo al ser amado que se quede.
Wake Me Up!- Avicii (feat. Aloe Bacc)
-Empieza a sonar como si de una canción folk o country se tratase, en una línea parecida al estilo de Mumford & Sons, para acabar desembocando en un puente electrónico al que Avicii nos tiene acostumbrados. Por decirlo de una manera, tiene una textura como más rural, cosa que acaba haciendo de Wake Me Up! una de las canciones del verano, y una de las destacadas del productor sueco.
I Need Your Love- Calvin Harris (feat. Ellie Goulding)
-Esta colaboración suena suave pero contundente... Son contrarios, pero la voz de Ellie Goulding contrastando con la base electrónica de Calvin, producen ése efecto. Y se complementan a la perfección. Una melodía dulce y unos puentes dinámicos.
"Y esto es todo, Sr. Leopardo." concluye el gato. "No me llamo así" replica el leopardo "¿O acaso tu te llamas Señor Don Gato?". "No, pero podría". Dicho esto, el gato se zambulle en el agua, dejando al leopardo con una expresión bastante perpleja. "¡Pero si a los gatos no os gusta el agua!"
Una casa construida en la primera mitad del siglo pasado. Elegante, sencilla. Fuera hace un calor bochornoso. Los termómetros marcan una temperatura más allá de los cuarenta grados. Una ola de calor jamás registrada en esa zona. Las noticias lo retransmiten. Temperaturas históricas. ¿Qué nos depara el futuro? Más calor. Todo el mundo bajo una nube de calor. El sol es espléndido, y cruel. Pero, en esa curiosa casa, todo transcurre como en otra época. Los colores se ven desvaídos, como con manchas, cual película antigua y desgastada. Palmeras que crecen en un jardín perdido en los pliegues del tiempo... Una piscina con excéntrica forma de corazón escondida entre las plantas. Los azulejos, otrora rosas, han cogido un color azul verdoso. Entre las turbias aguas hay alguien sumergido. Pasan los minutos y no emerge. Han transcurrido dos horas cuando se ve la silueta ascender. Una mujer gris (está en blanco y negro), dice a una segunda persona inexistente "¡Ven! Aquí abajo hay todo un mundo... Es increíble". A causa de una fuerte curiosidad, me meto en la piscina. Se me moja la ropa. La extraña me coge la mano, y caemos en picado. Ahí abajo no se ve nada. La suciedad me impide la visión. Pero entonces, todo es dorado. Árboles, animales, nubes bañados en oro. La mujer ríe estrepitosamente...
Una playa de noche. Una hoguera. Adolescentes alrededor de esta. Ríen, cantan, bailan. Una chica ha traído la guitarra incluso. Después de bailar, se cansan y se sientan. No tienen nada qué decir. Tienen las lenguas despojadas de palabras. Después de un largo silencio, uno de ellos habla. "¿Y si contamos historias de miedo?". Todos ríen. "Eso está muy visto... Y es aburrido" dicen. "¿Más que la conversación que estábamos teniendo?". Silencio. "Había una vez, un pescador al que, tras una tormenta, se le rompió la barca. Desesperado, intentó arreglarla. Pero las astillas se amontonaban sobre las astillas. No tenía mucho dinero para comprar otra, y si no podía pescar, tampoco ganaría más. Entonces se le ocurre recurrir al ermitaño del pueblo. Todos decían que era un lunático, pero él no les hizo caso. El hombre, de larga barba, era además conocido por su misterioso negocio esotérico. El pescador le contó su problema, y el ermitaño, rebuscando entre sus trastos, sacó una caja de bengalas". El adolescente hizo igual. "Dijo que cada bengala, era un deseo, pero..." No le dió tiempo a acabar la frase, porque una sombra salió de la nada, cogió la caja y la tiró al fuego. ¿Qué deseos eran los suyos? ¿Quién era? No se pudo saber, y no se sabrá. El mundo quedo sumido en sombras